Comprarse un coche y, en especial uno de segunda mano, es un proceso largo que requiere innumerables búsquedas, visitas a concesionarios y particulares para encontrar el coche perfecto, al mejor precio y en las mejores condiciones.
Sin embargo, antes de comprar un coche de estas características, hay que informarse bien y chequear escrupulosamente cada vehículo antes de decidirse.
¿Por qué? Porque un coche de ocasión puede suponer un ahorro muy significativo para nuestro bolsillo, pero también convertirse en un saco sin fondo como consecuencia de las averías a las que nos podemos enfrentar. Elegir con acierto no es solo una cuestión de instinto.
Por tanto, el precio, aunque es un factor muy importante, no nos puede influenciar en la toma de decisión. No hay que precipitarse, ante todo debemos observar todos esos elementos que determinan el buen o mal estado de un vehículo usado.
Estos son los aspectos que debes revisar antes de decantarte por un vehículo:
1. Preguntar al propietario. Plantearle de manera sutil cuestiones como por qué vende el coche e información relevante como cuántos kilómetros tiene, si ha sufrido algún accidente o si ha dormido en garaje es imprescindible para determinar su estado.
2. Documentación: Por supuesto, hay que verificar la información que nos va a proporcionar el propietario con documentos que lo acrediten. Para ello, deberemos solicitarle documentación como la ficha técnica o ITV, Tarjeta de Inspección Técnica o Permiso de Circulación para comprobar que todo está en orden.
3. Observar el exterior. Es aquí donde tenemos que sacar nuestra faceta más analítica y empezar revisando la pintura, los faros, el estado del paragolpe y las ruedas.
Si un coche ha estado siempre estacionado en la calle, sufrirá el deterioro mayor ya que el frío, la lluvia o el calor aceleran su deterioro. Los cambios de temperatura pueden dañar las ruedas y la exposición al sol, decolora progresivamente la pintura.
Aunque no solo los factores externos pueden ser perjudiciales, los arañazos en la pintura, grietas en los cristales o un mal estado de las ruedas puede ser debido a que el vehículo no ha recibido el adecuado mantenimiento.
Otro elemento fundamental, es verificar el estado de la suspensión. Es muy fácil, sitúate en una esquina del coche y empújalo hacia abajo, si rebota más de una vez es que está muy blandas por lo que algo no va bien.
4. Revisar el interior: Aquí vamos a encontrar muchísimos indicios de cómo ha sido tratado el automóvil. El estado del volante, si la tapicería tienes manchas, si el salpicadero tiene arañazos o roturas, si las alfombrillas están en adecuado estado o los cinturones de seguridad engancha de manera adecuada, entre otras cosas…
El kilometraje es un signo de edad por lo que debemos buscar siempre un coche con pocos kilómetros El kilometraje medio por año normalmente se encuentra entre 16.000-24.000 km.
5. Revisar el mecanismo: Una vez verificado que el exterior y el interior del coche reciben nuestro aprobado. Debemos revisar una parte fundamental para su funcionamiento: la mecánica.
Una visión general del interior del capó nos permitirá determinar si tiene fugas y si todos sus componentes son de fábrica o ha sido manipulado.
Otro aspecto importante es verificar el estado del aceite, si al retirar el tapón hay restos de espuma, puede ser debido a que hay una fuga en la junta de culata y por tanto un indicador de que el coche no está en adecuadas condiciones. ¡Cuidado! La vida útil de estos coches es muy baja.
Debemos tener en cuenta que si el coche ha dormido en el exterior, la batería puede verse afectada por los cambios de temperatura y su vida útil va a ser más corta.
6. Por último y más importante: Prueba de conducción. Es la prueba final donde vamos a poder verificar si arranca a la primera, si los frenos hacen su función adecuadamente o si la carrocería presenta vibraciones. Si esto es así, puede provocar un desgaste desigual progresivo en los neumáticos, dirección y suspensión.
Con estos tips no te vamos a asegurar que elijas la mejor opción pero sí te pueden ayudar. Sin embargo, si buscas asegurar que tu coche no te va a dar problemas, te proponemos una de las mejores alternativas a la compra: la suscripción a un coche
Desde Bipi aseguramos y certificamos que tu coche estará en las mejores condiciones y sino siempre puedes cambiarlo por otro.